Arantxa Cossío: La promesa del tenis de mesa que se volvió olímpica
La jalisciense disputará sus primeros Juegos Olímpicos en París 2024 tras una histórica clasificación al consagrarse como una de las mejores exponentes de América
En un deporte que apenas conocía, que consideraba un juego de niños y que se introdujo en su vida gracias a un curso de verano, Arantxa Estefanía Cossío Aceves es actualmente una jugadora histórica en el tenis de mesa mexicano.
Con 20 años, la jalisciense, oriunda de Tototlán, se instaló por primera vez en unos Juegos Olímpicos tras consagrarse como una de las mejores exponentes femeniles de la disciplina de América en el clasificatorio continental de la disciplina realizado en mayo pasado.
“Desde pequeña nadé, jugué un poco de futbol, voleibol y siempre me gustaba mantenerme activa, correr y en agosto de 2013 en los cursos de verano del CODE Jalisco hice unos cursos de verano como pasatiempo y ahí conocí el tenis de mesa, mi entrenadora habló con mis papás para becarme, cambiarme de escuela y así fue como conocí este deporte”, recordó con nostalgia.
“Cuando entré había jugado tenis de mesa antes con mi papá, pero de hobbie, antes de conocerlo aquí nunca había lo había visto en un juego profesional, no tenía idea de que tantas cosas se podían hacer en la mesa principalmente fue eso lo divertido que eran los cursos de verano”, contó.
Arantxa Cossío afianzó su camino en el tenis de mesa y a los 16 años consolidó uno de sus mayores objetivos: llegar a la selección mayor. La suma de fogueo y experiencia llegó de la mano de una consecución de eventos internacionales que se sumaron a su historial, la jalisciense fue forjando su camino, pues de ser una promesa del tenis de mesa, hoy es una realidad.
“Tuve la suerte de entrar a selección mayor con 16 años, gané mi primer centroamericano mayor y el entrar pequeña me ayudó bastante porque los primeros años era de experiencia, de foguearte y siento que esto me ayudó el tener competencias mayores y saber la diferencia”, aseguró.
Cali-Valle 2021: El inicio del sueño olímpico
La joven tenimesista recuerda con una sonrisa los Juegos Panamericanos Juveniles Cali-Valle 2021, donde conquistó un oro y tres platas en la primera edición del evento que se llevó a cabo en Colombia, pues detalló que fue en esa justa donde se acentuó el sueño olímpico, que hoy la tiene dentro de la magna justa deportiva.
“Para esos Juegos tuvimos bastante apoyo, una preparación en el CNAR, concentraciones, torneos internacionales que nos ayudó; era muy chiquita tenía 17 años y los Juegos fueron Sub-21, no tenía esa presión de querer ganar o ser campeona, solo aprender”, dijo.
"Estar en el podio, cuando nos entregaron la medalla y escuchar el Himno Nacional se me enchina la piel es algo que me llena, que cuando lo pienso y lo vivo es una emoción que no se puede describir, solo de pensar en un orgullo que es representar a México y ahí fue el inicio de este ciclo”, aseguró.
Los Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023 y los Juegos Panamericanos Santiago 2023 se unieron al historial de Arantxa Cossío, un trayecto que la encaminó a París 2024.
Histórico boleto olímpico, punto con sabor a gloria
El pasado 18 de mayo, la tenimesista alcanzó la gloria y se proclamó ganadora en el Clasificatorio Olímpico de las Américas tras derrotar en la final de la segunda vuelta a la venezolana Roxy González con marcador de 4-1, que la situó como la primera mujer tenimesista nacida en México que disputará el magno certamen deportivo.
“El último punto que hice para ganar, siempre lo he dicho, fue un alivio para mí fue una sensación de lo logré, cuando gané la presión me bajé simplemente me relajé tenía dos torneo más y lo único que quería era regresar a mi casa, festejar con mis papás porque una semana antes fue mi cumpleaños, sentí alegría de que los cinco meses que estuve fuera de casa habían valido la pena”, mencionó.
“En 2022, después de Cali, sabía que París no se veía tan lejos, que si seguía trabajando y dedicando podía estar ahí, mucha gente dudó de mí y no confiaba. El año pasado mis familiares y entrenadores me preguntaban si iba a estar ahí, pero esas cosas a veces motivan, pero también presionan, fue un poco difícil llevar esta presión porque todos tenían la visión de que podía clasificar y que lo podía lograr”, contó.
“El tenis de mesa se convirtió en mi vida”
Al pasar los años, Arantxa Cossío destacó que el tenis de mesa ha sido de las mejores decisiones de su vida, y a su corta edad, desea trascender en este deporte y marcar un punto de inflexión, pues desea que su participación olímpica sume al crecimiento de la disciplina.
“Espero que este logro impacte en otras personas, que sea algo para el bien del tenis de mesa en México, esto es mi vida es lo único que hago, no estudio por el momento, el tenis de mesa me ha dado satisfacciones que nunca me había imaginado antes, es mi vida, es todo lo que tengo, lo que disfruto hacer y gracias a eso es que estoy donde estoy”, compartió.
“Me da sentimiento recordar a la Arantxa de 9 años que comenzó, solamente me da felicidad de saber que tantos sacrificios ha valido la pena. Gracias a mi disciplina y al apoyo de entrenadores, mi familia en realidad esto es gracias a ellos no hubiera sido posible y estoy feliz de que Arantxa chiquita nunca se rindió y que mis papás siempre estuvieron ahí y feliz de haber podido lograr esto que apenas empieza”, finalizó.
